Apodos Maracuchos

Ambulancia: A partir del hecho que a las ambulancias les meten el paciente por detrás, ya deducimos a qué personajes les decimos de esa manera ¡Ay, papi!
Azulceleste: Así se les dice a las personas que tienen un defecto visual, que consiste en que uno de sus ojos mira hacia el sur y el otro hacia el este. Claro, es exagerado, pero se les dice así.
Cabeza ‘e periódico: Es evidente que se les dice así a los que tienen el pelo canoso, pero no por completo. También se les puede llamar cagao ‘e buchón. -
Cara ‘e muerto: Los requisitos para ser llamado cara ‘e muerto son: piel pálida, cara huesuda y, sobre todo, los ojos caídos hasta la mitad. Si la persona también es lerda, entonces el mandao está hecho.
Cara ‘e nalga: Cualquiera de nosotros puede ser cara ‘e nalga, basta con que sea feo o con facciones cómicas o ridículas.
Carne frita: Aquí sí no hay pa’ donde coger. Ni siquiera le vamos a explicar cómo es un sujeto carne frita. Usted busque a alguien que se parezca a una carne frita... y ese es.
Cerro ‘e cacho: Cualquiera se imagina que con esto se señala al hombre -a veces también a la mujer- cuya pareja la engaña con otro u otra.
Cerro prendio: Para colocárselo a alguien éste es fácil. Es suficiente con que la víctima tenga el pelo rojizo, y si está parao mucho mejor.
Cuello ‘e pipa: Hay personas que no pueden usar franelas cuello ‘e tortuga, precisamente por el grosor del cuello, que es muy exagerado, por eso se les dice con razón cuello ‘e pipa.
Coquimbo: A cualquier negrito, sea azul, morado o marrón, puede decírsele coquimbo.
Cristo ‘e lata: Basta imaginarnos cómo es un cristo y cómo es una lata. El resto se logra al ver a alguien que tenga esa contextura.
Culo ‘e foca: De ahora en adelante se va a fijar en todas las personas que le pasen por su lado, si tiene las nalgas aplanadas o casi inexistentes es un culo ‘e foca. Eso sí, mire con disimulo, por que le agarran a usted por el cu...ello.
Culo ‘e pato: Así como las focas tienen su culo, los patos también, que es la posición contraria, es decir, son llamados así los hombres que tienen el fondillo parao, que son muchos. Pero hay que aclarar que no tienen nada que ver con el comportamiento de los patos.
Chispiao ‘e regla: ¿Han visto alguna vez la cara de alguien -hombre o mujer- que tiene verrugas con color de sangre en cara y cuerpo? Ese es un chispiao ‘e regla.
Dumbo: Si usted ve a alguien más o menos gordito, bajito, cuello ancho y con !as orejas grandes y más o menos flojas, llámelo Dumbo... y aguante una trompada de elefante.
Jeta ‘e bagre: Boca alargada horizontalmente y labios un poco carnosos, son suficientes para clavarle a quien sea el apodo de jeta ‘e bagre, y si tiene bigotes más.
Jeta ‘e cloaca: Es fácil describir y colocar este apodo, basta con acercarse a quien sea el poseedor de la alcantarilla que tiene en la boca.
Huevo ‘e pava: Los candidatos a recibir este mote tienen la cara, espaldas ó el cuerpo cubierto con pinticas que asemejan, precisamente, el huevo de una pava.
Los repetíos: Este es un apodo comunitario. Se les aplica a los integrantes de una familia que son idénticos... como si se hubieran cortado con el mismo tijerazo.
Media res: Imagínese el tamaño y el peso que tiene media vaca y aplíquele este mote a la persona más gorda que vea, especialmente si es bajita de estatura.
Mono plástico: Si usted conoce a un amigo o enemigo y éste hace muchas monerías, puede llamarlo mono plástico con confianza, pero no abuse, que todo el mundo también tiene su corazoncito.
Muñeco porfiao: Así se le dice a la persona necia -ladilla o chicle entre nosotros. Dígame si está rascao, ¡muchacho!
Nariz de guante: Es típica, en las personas que tienen el órgano respiratorio externo ubicado epicéntricamente entre ojos, pómulos y boca (o sea las fosas nasales), su conformación en forma de guante, pero ojo, no de cirugía sino de béisbol.

Ford, Dios... y las mujeres

Henry Ford se muere y llega al cielo.
En la puerta, San Pedro lo recibe y le dice:
- Bien, tú fuiste una persona buena y...ni hablar de tu invención, la cadena de montaje para automóviles... ¡Cambiaron al mundo! Como recompensa, te permitiremos pasear a voluntad en el cielo.
Ford piensa por un momento y solicita: Yo quiero estar junto a Dios por un rato.
Entonces, San Pedro le pide a un ángel que acompañe a Ford a la sala privada del Todopoderoso.
Ford entra en la sala y le pregunta a Dios con reverencia:
- Todopoderoso, cuando inventaste a la mujer, ¿en qué pensabas?
- ¿Qué quieres decir con eso? Pregunta el Todopoderoso
- Bueno señor, hay grandes problemas en el proyecto de tu invención:
No existe ningún modelo económico.
Hace mucho ruido cuando se calienta.
El mantenimiento es extremadamente caro. Necesita constantemente de pintura.
Tiene que parar 5 días de cada 28.
El sistema se tapa y es necesario anularle algunos tramos.
Antes del primer tercio de su vida se le caen las defensas delanteras y traseras.
Las vestiduras se cuartean a los pocos kilómetros.
El consumo de combustible es asombroso.
Es muy lento comparado con el otro modelo que hiciste.
Y los costos son sólo algunos de los problemas...
Dios va para la súper computadora celestial, hace clic en un icono de la pantalla y, casi instantáneamente, aparece un listado.
Lee el informe, se vuelve hacia Ford y le dice:
Puede ser que mi proyecto tenga problemas como también dices.
Pero en este preciso momento... ¡hay más hombres montados en mi invento que en el tuyo!

Dime como orinas y te diré quién eres

El Científico: Mira al suelo mientras mea y al mismo tiempo examina las burbujas y hace experimentos sobre la presión del chorro vs. magnitud del pujo.

El Despreocupado: Mea toda la parte externa del inodoro o mea en el lavamanos si encuentra todos los retretes ocupados.

El Distraído: Se desabrocha la bragueta, se saca una punta de la camisa y se mea en los pantalones.

El Débil: Dura varios minutos buscándosela entre la bragueta y al final decide bajarse por completo los pantalones para poder sacarla.

El Fanfarrón: Se desabrocha cinco botones para sacársela cuando dos hubieran sido suficientes.

El Infantil: Dirige el chorro hacia arriba y hacia abajo, intentando llegar más alto o cazar un insecto.

El Insidioso: Deja escapar un silencioso pedo, luego olfatea y mira acusadoramente al vecino.

El Nervioso: No encuentra la bragueta, se desgarra el cinturón y se arranca los botones o la cremallera.

El Práctico: Mea sin agarrársela y al mismo tiempo se arregla la corbata.

El Pulcro: Se la saca con dos deditos, aprieta el botón antes y después de orinar, luego dura 15 minutos lavándose las manos.

El Sociable: Le gusta juntarse con los amigos para una meada social y colectiva.

El Confundido: Le gusta orinar sentado en el inodoro por si acaso quiere salir otra cosa.

El Disfrutador: Cuando orina lanza unos suspiros de alivio que cualquiera cree está masturbándose.

El Tímido: No puede mear cuando alguien lo mira, hace como si ya hubiera meado, se cierra la bragueta y se escabulle silenciosamente.
El Somnoliento: Se mea los pantalones y los zapatos, luego se va con la bragueta abierta y no se da cuenta hasta que alguien se lo advierte.

Si te pasa algo de esto, considéralo un mal día

Enciendes el televisor y los noticieros muestran rutas de emergencia para abandonar la ciudad.

Tu hermano gemelo olvidó tu cumpleaños.

Llegas a la oficina y tu jefe te dice que no te molestes en quitarte el abrigo.

Tienes una cita a ciegas... con tu ex-esposa.

Te pusiste los dos lentes de contacto... en el mismo ojo.

Tu esposa te dice "Buenos días, Carlos" y tu nombre es José.

El ave que canta en tu ventana todas las mañanas es un buitre.

Llamas a 'prevención de suicidios' y te dejan en espera.

Es más caro llenar de combustible tu coche que tu coche en sí.

Tenéis que pedir prestado de tu Visa para pagar tu Mastercard.

Tu esposa cambió el "¿Cómo estás?" por el "¿Encontraste trabajo?".

Te pones el interior al revés... y te calza mejor.

Te despiertas boca abajo... en la vereda.

La chica con la que has estado saliendo, comienza a parecerse a tu mujer.

Tu torta de cumpleaños se destroza... debido al peso de todas esas velas.

Tu mujer se despierta más mimosa que nunca y a ti te duele la cabeza.

Tu hija de 17 años sigue diciendo que no fue un accidente... aún en el quinto mes de embarazo.