El que te hayan vendido la Plaza Baralt dos veces no quiere decir que sois un retrasado mental.
— Mi mujer le tiene pavor al mar.
— ¿Es que no sabe nadar?
— Sí sabe, lo que pasa es que no puede mantener la boca cerrada.
- La verdad que pa' ser tan chiquito, tenéis la moral alta.
- La verdad es que vos no sois gorda, sino que tenéis un gran peso moral
- Mira, ese hombre no deja de mirarme las piernas -confía la mujer a su esposo.
- Yo creo que estáis equivocada....
- No y no; te digo que no hace más que mirarme las piernas...
- Que estáis equivocada, te repito... Es que como estáis tan mal sentada lo que está viendo son tus bragas.
-¿Y cómo me va a ver las bragas, si no las llevo puestas?
- Vos sois como el oso…
- Sí, mi amor, pero más hermoso…
- Nada de eso: sois más asqueroso.
- Realmente vos no sois tan calvo, pero levantá la cabeza porque me estáis encandilando.
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